Los periodos festivos en los que salimos de vacaciones suelen ser los más esperados del año, sin embargo, aprovechando nuestra impaciencia por partir y desconectar, algunos despistes pueden ser aprovechados por los ladrones para entrar en casa y robar a sus anchas.
Aunque según los datos del Ministerio del Interior, el número de robos con fuerza en viviendas han disminuido un 10% con respecto a 2010, no debemos bajar la guardia. Aquí os dejamos algunos consejos para que las vacaciones no acaben con un final inesperado.
1.- Que parezca que haya gente: Las persianas totalmente cerradas o la ropa tendida durante varios días son dos indicadores claros de que la casa está completamente vacía.
Por eso, se recomienza emplear las nuevas tecnologías para aparentar que hay alguien en casa. De hecho, algunos temporizadores permiten encender las luces, la televisión u otros aparatos a determinadas horas para simular una vida normal en el interior de la vivienda.
2.- Cuidado con las redes sociales: No debemos fiarnos de que tenemos el perfil cerrado solo para amigos, porque puede ser que alguno de ellos no lo tenga del mismo modo, por lo que puede haber gente que acabe siendo conocedor de tu paradero, de la duración de tu viaje… y aproveche para entrar.
3.- Estar localizable: Hace años, localizar a cualquiera de vacaciones era una misión casi imposible (no había teléfono en los apartamentos, ni en el pueblo y localizar a alguien en un hotel era complicado). Por eso, además de informar a tu familia de tu estado de manera habitual, nunca está de más que tu vecino sepa tu número de teléfono para que pueda ponerse en contacto contigo en caso de cualquier anomalía.
4.- Esconder los objetos de valor: Siempre es recomendable esconder los objetos de valor en lugares muy seguros y, sobre todo, poco habituales o en cajas fuertes. Actualmente existen varios modelos cajas fuerte que, gracias a las nuevas tecnologías, podemos esconder en cualquier lugar de la casa por un bajo coste.
5.- Recoger el correo: Aunque gracias al correo electrónico se ha reducido enormemente la comunicación en papel, siempre algunas empresas nos envían algunas comunicaciones por la vía tradicional. Por ello, es recomendable pedir a algún vecino o familiar que recoja el correo de forma periódica.
6.- No escondas las llaves: Olvídate del viejo truco de dejar las llaves en la maceta o debajo del felpudo. Recuerda que, al estar ausente, los ladrones van a tener todo el tiempo del mundo para poder averiguar esos escondites. Y, si lo consiguen, les estarás dejando vía libre.
Recuerda también darle la clave de la alarma al encargado de regar las plantas ya que, de lo contrario, saltará la alarma cada vez que entre. En este caso también existen sistemas modernos que se encargan de regar, por si no deseas dejarle la clave a nadie.
7.- Bajar el timbre del teléfono: Un teléfono que suena constantemente día tras día sin que nadie responda es una señal evidente de que no hay nadie en casa. Antes de salir de vacaciones, recuerda desconectar el teléfono, desviar las llamadas o bajarle el volumen.
8.- Rejas y alarmas: Tener rejas, alarmas, dobles cierres, puertas acorazadas… pueden suponer un efecto disuasorio para los ladrones. . También hay aplicaciones, programas informáticos y sistemas de domótica que te permiten vigilar la vivienda mientras estás fuera.
Desde ITM Sistemas recomendamos seguir estos consejos ya que el período estival es uno de los que registra más robos en las viviendas, principalmente motivados por una demasiada confianza de los dueños. Por ello, extremar el cuidado y un buen sistema de seguridad protegerán enormemente sus pertenencias.